¿Con quién me casaré?

¿Con quién me casaré?

Parte 7


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6 ¿PODEMOS CONVERSAR JUNTOS DURANTE LARGAS HORAS O NO TENEMOS
NADA DE QUE HABLAR?:
Se dice que el verdadero amor habla. El amor sin conversación pronto muere. El amor no
es algo automático; debe cultivarse, y para ello es preciso conversar y compartir el uno
con el otro. El amor se expresa revelándose en hechos y con palabras.
Es necesario tomar tiempo para compartir, charlar, conocer las inquietudes, sueños,
aspiraciones, modos de pensar de la otra persona, etc. Esto sólo se logra a través del diálogo, y
deberás aprender a compartirlo con tu novio/a.
7 ¿ESTOY DISPUESTO A ESPERAR CUANTO TIEMPO SEA NECESARIO? :
Cuando una persona está exageradamente apurada en casarse, es porque algo no anda
bien. El apuro extremado por regla general es meramente sexual, o símbolo de una falta de
madurez, o en ocasiones el querer escapar del hogar o lugar donde esta viviendo.

El amor es paciente. El verdadero amor sabe esperar el momento adecuado. En Gálatas 4.4
leemos que "cuando llegó el momento que tenía determinado, Dios envió a su Hijo".
De la misma manera sucede con el matrimonio. El hombre y la mujer cristianos esperan que
llegue el momento" que Dios ha indicado y determinado.
8. ¿QUIERO SER LA CLASE DE PERSONA QUE MI COMPAÑERO/A PUEDA RESPETAR,
O PRETENDO HACER TODO POR LA FUERZA?:
¿Quiero salir siempre con la mía o busco el bien y los deseos del otro?
No debes olvidar lo que dice 1Corintios 13 hablando del amor genuino. "El amor no es
presumido ni orgulloso; no es arrogante ni egoísta. No trata de salirse siempre con la
suya".
Cuando existe verdadero amor, los dos están buscando el bien del otro y no el bien
propio. El que ama desea el bien de la persona amada.
Debe existir respeto mutuo, considerando la opinión y la voluntad de mi compañero/a.
9 ¿ES ELLA LA JOVEN IDÓNEA PARA MÍ? ¿ES ÉL EL JOVEN IDÓNEO? :
¿SUPLIRÁ LAS DEFICIENCIAS MÍAS?, ¿SUPLIRÉ YO LAS SUYAS?

Tu pareja debe ser tu complemento, tu otra mitad, de manera que juntos vivan para la
gloria de Dios.
Debemos recordar que esto es un proceso donde ambos deberán conocerse y aprender a
complementarse mutuamente, no te impacientes. Pero si este proceso se hace imposible,
entonces es una señal de peligro.
El propósito de Dios es que ambos se complementen y se ayuden mutuamente. Deberías
entonces preguntarte: ¿Estoy dispuesto/a a ayudar a mi novio/a?

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